La reforma laboral impulsada por el Gobierno busca reducir la informalidad laboral, eliminar la industria del juicio laboral y beneficiar a millones de monotributistas, representando un paso importante para mejorar las condiciones laborales en el país.

La Ley Bases representa un avance significativo para el mundo laboral en Argentina al apuntar a reducir la informalidad laboral, un problema que afecta a una gran parte de la fuerza laboral del país. 

La eliminación de la industria del juicio laboral es otro objetivo clave de esta reforma, ya que busca agilizar los procesos judiciales relacionados con conflictos laborales, lo que beneficiaría tanto a empleadores como a empleados al reducir costos y tiempos de resolución.

Esta reforma busca brindarles mayores beneficios y protección, lo que podría mejorar significativamente sus condiciones laborales y sociales. Además, al promover la formalización laboral, la ley podría contribuir a un aumento en la recaudación fiscal y a una mayor estabilidad económica en general.