La agrupación opositora continúa con sus esfuerzos para impedir que el paquete de medidas sea votado ya que establece una pérdida de beneficios en la planta política y erradica la corrupción en el aparato estatal.

El escenario político argentino se encuentra en ebullición una vez más, esta vez, en torno a la propuesta de la Ley Bases, un paquete de medidas que promete reformar profundamente el sistema político y administrativo del país. 

Sin embargo, la oposición liderada por el kirchnerismo ha levantado un muro de resistencia frente a esta iniciativa, desplegando una serie de argumentos que delinean su férrea oposición.

Uno de los puntos de mayor controversia para el kirchnerismo radica en las posibles consecuencias que la Ley Bases podría acarrear para la clase política. En particular, la medida establece una pérdida de beneficios en la planta política, lo que ha generado inquietud y resistencia entre aquellos que se ven afectados por estas disposiciones. 

Por otro lado, la propuesta de la Ley Bases también busca erradicar la corrupción arraigada en el aparato estatal, implementando medidas de transparencia y rendición de cuentas.